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Tano FESTA


(1938 - 1988)

Tano Festa nació en Roma en 1938. Su carrera artística tuvo dos inicios: el primero, a la edad de seis años, cuando su padre lo alentó para que se dedicara a la pintura por afición; el segundo, cuando se matriculó en el Instituto de Arte de Roma para estudiar pintura y fotografía, donde se graduó en 1957. La pintura gestual tuvo una repercusión innegable en el joven Festa, que citaba entre sus influencias a Twombly, Matta, Tobey, De Kooning y Pollock.
La primera oportunidad que tuvo de exponer su obra surgió en 1959 en la Galleria La Salita de Roma, en el marco de una exposición colectiva con Franco Angeli y Giuseppe Uncini. Dos años más tarde, organizaría su primera exposición individual en la misma galería. Sin embargo, su primera gran oportunidad llegó en 1962-1964, cuando participó en la exposición The New Realism en Nueva York, con Mario Schifano, Enrico Baj y Mimmo Rotella, antes de participar en la Bienal de Venecia.
Poco después de hacer su aparición en la escena internacional, Festa lloraba la pérdida de su hermano, Francesco Lo Savio, que se quitó la vida en un hotel de Marsella en 1963. Esta tragedia tuvo un profundo impacto en la obra de Festa, que empezó a pintar con una violencia sin precedentes, sumergiendo sus manos directamente en la pintura. Su frenesí fue in crescendo hasta que acabó por detenerse en seco. Falto de empuje e inspiración, Festa se refugió en las drogas, el alcohol y la medicación, y cayó en la pobreza, la precariedad y el olvido. La mayor parte de los años setenta se perdieron en esta época de oscuridad. Sin embargo, felizmente, una invitación a la Bienal de Venecia en 1980 reavivaría su chispa creativa y lo llevaría a producir el ciclo Coriandoli. Enseguida surgieron nuevas oportunidades, como la exposición Artisti Italiani 1950-1983, organizada en 1982, que favorecieron este nuevo impulso artístico.
Tras un período inicial marcado por ensamblajes geométricos en gris y monocromos, Festa pasó de la investigación gráfica al poder expresivo. Para ello, evolucionó hacia los objetos de la vida cotidiana cuyas funciones prácticas se subvertían a través de la pintura. Las puertas, ventanas y postigos ocupaban un lugar destacado en su obra. Esta selección de objetos es, por supuesto, significativa, ya que simbolizan la comunicación espacial y la transición de unos a otros. Al aplanarlos en imágenes, Festa los despojó de su propósito funcional, e incluso simbólico: el espacio ilusorio de la pintura sigue siendo un espacio que el espectador experimenta como una transición perceptiva, pero únicamente a través de la subversión. El diálogo permanente de Festa con Miguel Ángel se desarrollaba de forma similar. Aunque parece recurrir a la cultura pop, las numerosas referencias al maestro italiano hablan de una herencia que merece apropiación y nuevas perspectivas.
Tano Festa, a quien normalmente se asocia con el movimiento del arte pop romano, es innegablemente un artista de la subversión y la diversión, pero tal vez no en el sentido que cabría esperar. El arte pop italiano se adhiere verdaderamente al concepto de lo «popular». Mientras que los estadounidenses centran quizá la atención en los productos y las marcas, los italianos siguen consumiendo —a veces incluso en un sentido literal— imágenes culturales a diario. Festa puso el ejemplo de los envoltorios de chocolatinas con imágenes de la Mona Lisa. A medida que la cultura adquiría un carácter cada vez más industrial y comercial, Festa y sus colegas prefirieron volver a considerar los elementos esenciales del arte del Renacimiento como anuncios publicitarios y no como imágenes de publicidad en sí mismas.
Entre sus exposiciones individuales y colectivas destacan: 5 pittori – Roma 60: Angeli, Festa, Lo Savio, Schifano e Uncini, Galleria La Salita de Roma (1960); Vitalità del negativo nell’arte italiana 1960/70, Palazzo delle Esposizioni de Roma (1970); Bienale de Venecia (1964, 1978, 1980, 1984, 1993, 1995 y 2013); The Italian Metamorphosis, 1943-1968, Museo Guggenheim de Nueva York (1994); Minimalia: An Italian Vision in 20th Century Art, Museo de Arte Moderno de Nueva York (1999); Italics. Arte Italiana fra Tradizione e Rivoluzione, 1968-2008, Palazzo Grassi de la Fundación François Pinault de Venecia (2008); y Museo de Arte Contemporáneo de Chicago (2009).

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